Fundador
Nació en Italia (Europa) el 17 de Junio de 1920.
Eran los años en los que concluía la Primera Guerra Mundial, cuando brilló la luz en el lugar denominado Busseto en la región de Parma.
Sus primeros estudios los realizó en la Escuela Primaria del pueblo de Coltera. Fue criado en el calor de un hogar cristiano e ingresó al Instituto Misionero de Penango, en Italia, respondiendo al llamado del Señor.
En el año 1934 llegó al Perú continuando sus estudios eclesiásticos en el Seminario "Santo Toribio" de Lima. Fue trasladado a la ciudad de Huancayo en 1945 realizando sus estudios en el Seminario de San Pio X de esta ciudad, por lo que recibe en 1952 la orden del Diácono para posteriormente ser ordenado sacerdote.
Fue trasladado a la ciudad de Trujillo continuando sus numerosas obras.
Es así como el 15 de Agosto de 1965 funda en la parte sur de la ciudad de Trujillo, el Colegio Parroquial Dante Alighieri del que sería su Director por 33 años. Durante ese tiempo se preocupó por la formación integral de niños y jóvenes. Junto a este recinto, levantó la Parroquia San Martín de Porras.
Otras obras que hizo fueron la ayuda a los pobladores de Huayabito – Poroto, en la construcción de su iglesia y carretera. También culminó los trámites para la donación del terreno para la Iglesia Santa María Reina en la Urbanización del mismo nombre. Se sabe de las becas de estudios otorgadas por él a los jóvenes aguarunas y huambitas.
Cng. Mons. Lorenzo Adorni Tuperti
FUNDADOR
I.E.P. DANTE ALIGHIERI
Desempeñó la docencia en la G.U.E "Santa Isabel" de Huancayo, la G.U.E "José Faustino Sánchez Carrión" de Trujillo, el Instituto Pedagógico Juan Pablo II y el Colegio Dante Alighieri.
Ya en el año 1998, por razones personales, Monseñor Adorni, creyó conveniente retirarse del servicio de su colegio.
El lunes 1º de setiembre del 2003 falleció a las 8:06 de la noche en el Hospital Víctor Lazarte de Trujillo, a la edad de 83 años, dejando tras su muerte un gran vacío entre todas las personas que lo apreciaban.
Fue velado en el Colegio Dante Alighieri y en la Basílica Mayor Catedral de Trujillo.
Numerosas felicitaciones y reconocimiento ha recibido por su excelente labor de religioso, maestro, padre, y pastor, pero estamos seguros que ningún reconocimiento alcanza a retribuir en su justa dimensión todo el bien que realizó.
Lo que sí será grande y perenne, es la GRATITUD Y EL CARIÑO de los miles de peruanos que conocieron su labor y hoy bendicen su obra.